En pleno siglo XXI y en un
continente en el que priman
la libertad y la igualdad de todos
los ciudadanos y que garantiza
por ley el derecho a la atención
sanitaria de los inmigrantes
'sin papeles', la realidad es muy
diferente. La Red Internacional
de Médicos del Mundo ha puesto
sobre la mesa, gracias a la realización
del primer Observatorio
Europeo de Acceso a los sistemas
sanitarios, datos que hasta
ahora nadie había sacado a la
luz. Así, aunque el 78% de las
personas encuestadas, todas
ellas inmigrantes 'sin papeles',
pueden beneficiarse, teóricamente,
de una cobertura sanitaria,
en la práctica sólo lo hacen
el 24%. El desconocimiento de
los derechos y de los lugares a
los que pueden dirigirse para
solicitar información, el coste de
los tratamientos, las dificultades
administrativas, el temor a ser
denunciado, el miedo a la discriminación
social y las barreras
lingüísticas y culturales son las
principales trabas que impiden
hacer realidad unos derechos
que en la mayor parte de los casos
no son más que teóricos.
Problemas
administrativos
Todo depende del país europeo
en el que inmigrante resida
pues en algunos casos los procedimientos
administrativos están
todavía poniéndose en marcha.
Así, mientras que en Bélgica
y Francia la inmensa mayoría
no han podido ejercer realmente
su derecho a la cobertura sanitaria,
en España e Italia el número
de beneficiarios que han
podido hacer valer estos derechos
es mayor. Grecia es el caso
más extremo de los siete países
que han formado parte de esta
encuesta, ya que no sólo los derechos
son menos accesibles en
la práctica sino que en la teoría
están también más restringidos.
En cualquier caso, el hecho
es que mientras se busca
solución a todos estos obstáculos
sólo un tercio de las personas
encuestadas que sufren
problemas de salud crónicos
está recibiendo tratamiento.
El desconocimiento es una
de las mayores trabas que impiden
el acceso a la sanidad, hasta
tal punto que un 33% de las
personas encuestas en este estudio
no saben que tienen derecho
a disfrutar de cobertura
sanitaria. Así, por ejemplo, la
mayoría ignora que puede someterse
gratuitamente a una
prueba para la detección del
VIH y solamente una pequeña
parte sabe que sus hijos pueden
ser vacunados sin coste alguno.
El caso español
En España la asistencia sanitaria
es gratuita y está garantizada
para todos aquellos extranjeros
que estén empadronados
en el municipio en el que residen,
sea cual sea su situación.
El problema es que desde que
en 2003 la ley permite a la policía
acceder a los padrones
municipales muchos extranjeros
'ilegales' prefieren no empadronarse,
cerrándose así las
puertas de los servicios de salud.
Como no disponen de
tarjeta sanitaria sólo tiene derecho
a ser atendidos en caso
de urgencia si padecen una
enfermedad grave o han sufrido
un accidente.
No obstante, España es el
segundo país, tras Italia, con
mayor cobertura real puesto
que el 38,2% de los beneficiarios
han podido hacer realidad
su derecho y es el país donde
las personas entrevistadas están
mejor informadas, de hecho
prácticamente el 100% de
los beneficiarios conocían sus
derechos.
FUENTE: Observatorio Europeo de
Médicos del Mundo sobre el acceso
a los servicios de salud.