El síndrome de intestino irritable
(SII), también conocido
como colon irritable, es el
trastorno funcional gastrointestinal
más común. Diferentes
estudios han estimado que entre
un 10 y un 12% de la población
española presenta este
trastorno y se calcula que alrededor
de un 3% de las consultas
de atención primaria y de
un 16% a un 25% de las consultas
de gastroenterología
son debidas a esta afección.
Se caracteriza por la presencia
de síntomas gastrointestinales
recurrentes, como dolor
o malestar abdominal, junto
con alteraciones en el hábito
deposicional en número o en
consistencia (estreñimiento,
diarrea o ambos), en ausencia
de otros trastornos que justifiquen
los síntomas. Según los
especialistas, debe pensarse en
este síndrome cuando las molestias
o dolores abdominales
han estado presentes durante
más de doce semanas a lo largo
del último año.
El SII puede afectar a personas
de cualquier edad, aunque
es más habitual en adultos
jóvenes, principalmente
mujeres, disminuyendo su frecuencia
a partir de los 50 años
de edad. Aunque desde hace
muchos se investiga cuál puede
ser su origen, a día de hoy
no se conocen exactamente
las causas y se barajan posibles
factores: alteraciones de la
motilidad (movimiento) y de
la sensibilidad digestiva, trastornos
hormonales o alteraciones
psicológicas, entre otros.
A pesar de no ser aparentemente
un problema de salud
grave, el impacto en la calidad
de vida de los pacientes es considerable,
especialmente en los
que padecen síntomas moderados
o graves. Además, al ser
una enfermedad crónica, marcada
por temporadas buenas
(sin síntomas) y otras malas, es
necesario que la persona que lo
padece conozca bien qué es lo
que le pasa para que pueda
convivir con el síndrome de la
mejor manera posible.
El ritmo intestinal
El trastorno del ritmo intestinal
es una de las características
más importantes del síndrome
de intestino irritable. Aunque
en algunos pacientes la enfermedad
se manifiesta siempre
por diarrea, en otros casos es
frecuente la conocida como
"forma alternante", caracterizada
porque las crisis se presentan
unas veces con diarrea
y otras con estreñimiento.
La diarrea aparece, aproximadamente,
en un tercio de los
pacientes. Suelen darse unas
tres deposiciones diarias de heces
blandas o líquidas. Por su
parte, los episodios de estreñimiento
se caracterizan por la
evacuación cada tres o cuatro
días con heces duras, secas y en
forma de bolas o cintas. El estreñimiento
se acompaña de esfuerzo
para defecar, con sensación
de deposición incompleta.
Tratamiento
El síndrome de intestino irritable
no tiene un tratamiento específico
y dependerá de la intensidad
de los síntomas y de
la frecuencia y duración de las
crisis. Básicamente el paciente
deberá seguir unas normas higiénico-
dietéticas y tomar los
medicamentos prescritos por
el médico.
Una recomendación importante
es aumentar paulatinamente
la ingesta diaria de fibra.
Está demostrado que una
dieta rica en fibra vegetal (fruta,
vegetales y pan integral)
beneficia claramente a los pacientes,
ya que aumenta el volumen
de la masa fecal y disminuye
la presión en el interior
del colon. Esta dieta puede ser
suplementada con productos
de extractos vegetales de fibra
soluble preparados.
Para el tratamiento del
dolor abdominal se emplean
fármacos anticolinérgicos o
antiespasmódicos y para el estreñimiento
en algunas ocasiones
hay que recurrir al uso
de laxantes, que nunca han de
tomarse sin la prescripción del
médico, igual que en el caso
de los medicamentos que se
utilizan cuando el paciente
presenta crisis diarreicas.
Generalmente, la respuesta
al tratamiento es buena, pero
para ello es muy importante
que la persona que padece
síndrome de intestino irritable
cumpla las indicaciones que su
médico le marque, tanto en lo
que se refiere a las recomendaciones
dietéticas como a la
medicación. Se ha observado
que muchos de los pacientes
que mejoran inicialmente, empeoran
semanas después al
abandonar el tratamiento.
FUENTES: Sociedad Española de Patología
Digestiva y Convivir con el
síndrome de Intestino Irritable (Editorial
Médica Panamericana).
Más información: www.sepd.es;
www.hablaibs.org/index.html