E.P, Sevilla.- UGT y CC.OO. de Andalucía han anunciado la posibilidad de emprender nuevas movilizaciones e, inclusive, protagonizar encierros, 'ante la falta de respuesta de la Junta de Andalucía a nuestras peticiones de que los hospitales andaluces gestionados como empresas públicas (Epes) pasen a depender exclusivamente del SAS'. Las centrales sindicales consideraron que en su protesta de hoy sufrieron 'un desplante por parte de las autoridades competentes'.
La secretaria regional de Salud de UGT, María Angeles del Pino, dijo sentirse 'profundamente indignada' tras 'no haber sido recibidos por ninguna autoridad competente' a la hora de hacerle llegar al presidente autonómico, Manuel Chaves, la misiva que ambos sindicatos han redactado y en la que piden una 'integración absoluta' al Servicio Andaluz de Salud de los hospitales gestionados como empresas públicas.
En este sentido, Del Pino anunció que el próximo lunes se reunirá con su homólogo de CC.OO., Leonardo Romero, para hacer un balance de los actos de protesta realizados hasta el momento 'y analizar un posible nuevo calendario' Así, la dirigente de UGT, que indicó que a la concentración de hoy asistieron alrededor de unos 2.000 delegados sindicales de Salud de ambas organizaciones, anunció que no descartan la posibilidad de convocar, 'no ya sólo a los delegados sindicales, sino también a todos los trabajadores', si bien se mantuvo 'abierta al diálogo'.
Los 'problemas' que arrastra los hospitales andaluces gestionados como empresas públicas son 'endémicos de financiación y gestión de la Sanidad andaluza'. Por otra parte, la secretaria regional de Salud de UGT, ironizó sobre 'los resultados tan maravillosos en gestión y reducción de listas de espera que están teniendo las Epes' y subrayó que 'el 47 por ciento de los profesionales sanitarios de los alrededor de 3.000 que existen actualmente en plantilla que trabajaban con contrato fijo han preferido marcharse al SAS con contratos eventuales'.
A juicio de los secretarios regionales de Salud de ambas organizaciones sindicales, el modelo de gestión de empresa pública 'perjudica seriamente a los trabajadores que se inscriben en el mismo', ya que sus condiciones laborales y retributivas 'quedan muy mermadas en relación a sus homólogos del SAS'. A tenor de ello, Del Pino indicó que este modelo de gestión 'no beneficiará en nada a los usuarios de estos centros hospitalarios, puesto que no hay datos constatables que digan que, a pesar de que las condiciones laborales de sus trabajadores pierdan con respecto a los adscritos al SAS, se gane en calidad y mejora asistencial para los usuarios'.