Redacción, Granada.-Más de 4.200 médicos de familia atienden en Andalucía un volumen de urgencias que sobrepasa anualmente los 5 millones en los centros de Atención Primaria, mientras que en los hospitales este tipo de asistencia genera alrededor de 3,5 millones de consultas.
Para debatir distintos puntos de vista respecto a la que es considerada por estos profesionales "desbordada situación" y ante la elaboración de un nuevo plan de urgencias en esta comunidad autónoma, la Sociedad Andaluza de Medicina de Familia y Comunitaria (SAMFyC) celebró el pasado fin de semana en Granada unas jornadas científicas. Su principal objetivo fue analizar la situación a la que han de enfrentarse los facultativos que atienden este tipo de servicios y cómo el nuevo programa de la especialidad va a aportar importantes cambios en cuanto a la formación en este terreno.
Y es que tal como indicaron sus organizadores, "de lo que se decida respecto al nuevo modelo de atención a las urgencias, va a depender en gran medida el futuro de la Atención Primaria y del desempeño profesional del médico de familia, sea cual sea el lugar en donde se desarrolle su labor asistencial".
En la actualidad, y aunque este tipo de asistencia presenta gran variabilidad según se trate de áreas metropolitanas, ciudades medianas o municipios rurales más pequeños y dispersos, "los médicos de familia se enfrentan en los centros de salud a consultas muy masificadas, sobrecarga de tareas burocráticas y acumulación de turnos, además de tener que atender los avisos urgentes dentro y fuera del centro.
Por otra parte, tal como se expuso en el transcurso de las mismas, "la conjunción de diferentes factores dibuja un horizonte laboral incierto por varios motivos". Entre ellos, según apuntaron los participantes, "es discutible la capacidad del sistema público para disponer de suficientes médicos de familia para absorber y dar respuesta a esta creciente demanda asistencial". A ello se une la aplicación de una directiva europea que obliga al SAS a que los profesionales no sobrepasen las 48 horas semanales. la jubilación forzosa a los 65 años. y la cada vez más frecuente emigración de los médicos de familia a otros países del entorno europeo", entre otras.
Los organizadores de estas Jornadas se mostraron, finalmente, convencidos de que las estrategias para consolidar la coordinación en la atención de las urgencias y la idoneidad de los profesionales del primer nivel asistencial para atender esta demanda, tal como figuran entre las principales conclusiones del encuentro en Granada, "servirán de base al posicionamiento de la SAMFyC para garantizar a los ciudadanos la máxima calidad en la atención a la demanda urgente".